Escoliosis idiopática del adolescente

Escoliosis Idiopática del Adolescente: Causas, Síntomas y Deformidades

La Escoliosis Idiopática del Adolescente es una deformidad de la columna vertebral caracterizada por tres anomalías principales. Estas alteraciones afectan la estructura y alineación de la columna, siendo visible tanto desde el frente como desde el perfil. Además, provoca una rotación vertebral que puede originar una giba lumbar o torácica en el tronco.

¿Qué es una Escoliosis Verdadera?

Para diagnosticar una escoliosis verdadera, deben estar presentes las tres alteraciones estructurales:

  1. Desviación lateral de la columna vista en el plano frontal.
  2. Modificación del alineamiento lateral en el perfil de la columna.
  3. Rotación vertebral, que genera deformidades visibles en el tronco, como la aparición de una giba y asimetría en los hombros.

Aspectos Clave sobre la Escoliosis Idiopática

  • La escoliosis idiopática no suele ser dolorosa: En la mayoría de los casos, los pacientes no presentan dolor, aunque la deformidad pueda ser notable.
  • Causa desconocida (idiopática): Se denomina escoliosis idiopática cuando no se puede determinar una causa exacta. Es la forma más común de escoliosis, especialmente en adolescentes.
  • Edad de aparición: Esta condición generalmente surge durante la adolescencia, un periodo crítico para el desarrollo esquelético.
Escoliosis idiopatica del adolescente - Caso 1
Escoliosis idiopatica del adolescente - Caso 1
Escoliosis idiopatica del adolescente - Caso 2
Escoliosis idiopatica del adolescente - Caso 2

Deformidades en los Tres Planos Espaciales

La escoliosis idiopática del adolescente genera deformidades en los tres planos del espacio:

  1. Curvaturas anormales vistas de frente, afectando la alineación lateral de la columna.
  2. Alteración del perfil lateral normal de la columna vertebral.
  3. Rotación de las vértebras que afecta la caja torácica, generando una giba y la asimetría del tronco. Esto puede causar diferencias en la altura de los hombros y una prominencia de la escápula.

El desequilibrio resultante puede hacer que la cabeza no quede centrada sobre la pelvis, lo que impacta la postura y la simetría corporal del paciente.

FAQs

¿Cómo se diagnostica la escoliosis?

Lo primero y fundamental es la historia clínica y la exploración del paciente. Imprescindible.

Tras la exploración física para constatar la localización, el tipo y las alteraciones estéticas sobre el tronco, se debe realizar una radiografía de columna completa con el paciente de pie, tanto visto de frente como de perfil.

El médico evaluará las curvas así como su magnitud utilizando el método de Cobb. Ante la existencia de determinados signos y síntomas o ante patrones atípicos de deformidad será necesario solicitar una resonancia magnética o TAC.

¿Cómo se trata la escoliosis?

El tratamiento puede ser básicamente de tres tipos: observación, uso de corsés y tratamiento quirúrgico.

La indicación de uno u otro tipo de tratamiento depende de la valoración conjunta e individualizada de los siguientes factores: localización de la curva, grado de deformidad, nivel de madurez del paciente, alteración sobre el equlibrio y la estética y presencia o ausencia de progresión de la deformidad.

En base a todos estos parámetros se decide cual es el método ideal.

¿En qué consiste el tratamiento?

El tratamiento de elección para cada paciente es individualizado en función del grado de deformidad, del nivel de madurez, de la flexibilidad de la curva y de la implicación y tolerancia estética. En base un estudio detallado de todas estas variables se decide el tipo de tratamiento.

A grandes rasgos, existen tres grandes campos de tratamiento:

  1. Observación: en los casos en los que hay que hacer observación esta se lleva a cabo aproximadamente cada 6 meses clínicamente o asociada a radiografías. Está indicada en los casos más leves y con bajo riesgo de progresión
  2. Tratamiento con corsé que tiene como objetivo modular el crecimiento de la columna controlando la deformidad. No es corrector. El objetivo es que no progrese la curva para no llegar a niveles en los que se tenga que pensar en cirugía. Suele indicarse su uso alrededor de las 17 horas si bien, existen diferentes pautas y tipo dependiendo del tipo de curva y de la edad y madurez
  3. La cirugía, por el contrario, corrige la curva reequilibrando el tronco en sus dos planos y poniendo los medios para que no vuelva a aparecer con el tiempo. Dependiendo de la edad de aparición, el grado y la localización, el tipo de cirugía y la extensión de esta es diferente.
¿Qué consigue el tratamiento?

El uso del corsé pretende evitar la progresión de la deformidad y su objetivo principal no es la corrección o disminución de la curva.

La cirugía, cuando está indicada, realinea el tronco, corrige la deformidad y evita la progresión futura de la curva.

La selección de los niveles a intervenir la hacemos siguiendo los criterios mundialmente aceptados de ahorro de niveles operados con el objetivo de dejar la mayor parte de la columna vertebral libre para el resto de la vida.

¿Qué tipo de anestesia se utiliza?

Generalmente anestesia general.

¿Qué medidas de seguridad adicional utilizamos?

Todos nuestros pacientes son operados siempre por el mismo equipo quirúrgico lo que da una gran fiabilidad al proceso.

Siempre operamos a nuestros pacientes con control medular que lleva a cabo el servicio de Neurofisiología clínica del Hospital. Esta ayuda no hace desaparecer totalmente el riesgo neurológico, pero si disminuye notablemente la frecuencia de esta complicación y minimiza notablemente el riesgo de lesión permanente.

Todas nuestras cirugías se realizan con recuperador hemático que permite disminuir la cantidad de sangre externa que se precisa para suplir las pérdidas. Una parte de las pérdidas es recuperada y reinfundida al paciente.

¿Es siempre necesario el uso de implantes?

Para poder corregir la deformidad liberar la columna vértebra a vértebra en toda la zona deformada para poder desplazarlas a su lugar correcto y así corregir la curva.

El uso de implantes es imprescindible para mantener corregida la columna y permitir que se consiga un bloque óseo que evite la reaparición de la deformidad.

¿Los implantes son compatibles, se rechazan?

Todos los implantes son biocompatibles. Suelen ser Titanio o una aleación de cromo-cobalto. Los implantes, como todo elemento mecánico, pueden tener complicaciones como aflojamiento o rotura por sobrecara mecánica o se pueden infectar, pero no se rechazan.

¿Hay que retirar los implantes?

No deben retirarse salvo complicaciones que son poco frecuentes.

¿Después de operarme puedo hacer una vida normal?

Salvo deportes de contacto que, en un principio no se recomienda durante el primer año, si se puede hacer vida normal. Se recupera notablemente la calidad de vida que estaba condicionada por la sintomatología.

¿Cómo es la recuperación?

El paciente comienza a sentarse y caminar en las siguientes 24-48 horas de la cirugía. Al principio la cirugía es dolorosa, pero utilizamos múltiples medidas farmacológicas para disminuir el dolor.

Permanece en el hospital unos 6-8 días y recomendamos caminar y aumentar la actividad progresivamente.

Después de la cirugía generalmente no se utilizan corsés ni otros medios de sujeción externos. Pueden retornar a una actividad deportiva suave a los 4-6 meses de la cirugía pudiendo realizar deportes de contacto al año de la cirugía.

En nuestra práctica salvo progresión de riesgo, intentamos acomodar la cirugía de estos pacientes en los entornos de vacaciones de navidad y verano para no interferir con el colegio.

Realizamos un seguimiento programado a las 2-3 semanas, dos, seis y 12 meses y, posteriormente de manera anual.